Captura de pantalla de una conversación de WhatsApp entre Alex Kaffie y Elisa Beristain. Kaffie menciona que "no es plato de segunda mesa" y que codiciaba la primera entrevista de Elisa. La imagen tiene un fondo rojo con el logo de Beristime en la esquina inferior derecha.
El periodista Alex Kaffie responde a la propuesta de entrevista de Elisa Beristain con un mensaje contundente: "No soy plato de segunda mesa". 😱📲

¡Sigue el pleito! Alex Kaffie y Elisa Beristain se dicen de todo: ¿Quién miente?

¡Agárrense, comadres! Porque el chisme está que arde entre Elisa Beristain y Alex Kaffie, quien al parecer anda más perdido que GPS sin señal. Todo empezó cuando el periodista aseguró que tenía una entrevista pactada con nuestra querida Elisa, pero ¡oh, sorpresa! Resulta que eso es más falso que las promesas de año nuevo.

El drama de la llamada fantasma 📞👀

Según Kaffie, Elisa le colgó la llamada en vivo, dejando a su audiencia con el alma en un hilo. Pero la historia no cuadra porque… ¡ni siquiera habían pactado una entrevista! De hecho, Beristain ni siquiera abrió los mensajes del periodista, así que eso de que «le dejó plantado» es pura fantasía.

«Yo no le contesté, primero porque no somos amigos, y segundo porque para qué le voy a dar la primicia a alguien que anda diciendo mentiras sobre mí», dijo Elisa en su programa Beristime. ¡Tómala!

¿Exclusiva? Solo para Ana María Alvarado

Aquí viene lo mejor, mis chismosos de confianza: Elisa SÍ dio una entrevista exclusiva. Pero no a Kaffie, sino a Ana María Alvarado, una periodista que siempre ha sido profesional con ella. Y es que, como dice la sabiduría popular, «para amigos así, mejor solos».

Para rematar, Kaffie respondió con su característico tono de diva ofendida:
«Dile gracias de mi parte a la señora Beristain, pero no soy plato de segunda mesa».

¡Ay, no! Ahora resulta que él sí quería la exclusiva, pero cuando no se la dieron, se hizo el digno.

El tiro por la culata

Lo más chistoso de todo es que Kaffie ni siquiera sabía cómo marcar a Estados Unidos para supuestamente «hacer la entrevista». ¿Cómo iba a tenerla pactada si ni siquiera tenía el número correcto? Un chisme mal contado siempre se cae solo.

Pero, como diría nuestra querida Elisa: gracias por mantenerme vigente, aunque sea con chismes cachetones. Y es que, al final del día, el show debe continuar, y ella está más fuerte que nunca en Beristime.

¿Tú qué opinas? ¿Quién dice la verdad en este pleito? Déjanos tu comentario y comparte el chisme con tus amigas.