María Antonieta de las Nieves, nuestra entrañable Chilindrina, encendió las alarmas hace unos días al ser hospitalizada de emergencia en Perú. La actriz mexicana, de 78 años, presentó un cuadro de ansiedad y una fuerte deshidratación que le provocó un bajo nivel de sodio en la sangre, lo que derivó en síntomas neurológicos y preocupó a sus fanáticos en toda Latinoamérica.
¿Qué le pasó a La Chilindrina?
De acuerdo con medios peruanos y mexicanos, la actriz fue internada el pasado 20 de agosto de 2025, luego de sentirse mal durante su estancia en Lima. El diagnóstico médico señaló una descompensación derivada de crisis de ansiedad y niveles bajos de sodio, un problema que puede provocar mareos, confusión e incluso desmayos.
Ya está en casa y en recuperación
Afortunadamente, la querida actriz recibió alta médica y actualmente se encuentra en su hogar, donde sigue bajo tratamiento y reposo. Ella misma se encargó de tranquilizar a sus seguidores a través de un video publicado en redes sociales, donde con su característico buen ánimo dijo:
“Aquí como siempre estoy haciendo mis dibujitos, haciendo mis cosas que me gusta hacer… la estoy pasando muy bien. Gracias, los quiero muchísimo.”
Estas palabras trajeron calma a millones de fanáticos que crecieron con sus travesuras en El Chavo del 8.
Antecedentes de salud
Cabe recordar que María Antonieta de las Nieves ha hablado en varias ocasiones de su lucha contra la fibromialgia, una enfermedad crónica del sistema nervioso que provoca dolor generalizado y fatiga. Aunque este padecimiento no está relacionado directamente con su reciente hospitalización, sí forma parte de los retos de salud que ha enfrentado en los últimos años.
Un susto que recordó su grandeza
El breve ingreso hospitalario de “La Chilindrina” se convirtió en tema central en portales de espectáculos porque evidenció el enorme cariño y la vigencia que conserva la actriz. Cada mensaje de preocupación de sus seguidores y cada titular en medios es muestra de lo mucho que representa para varias generaciones.
Hoy, más tranquila y recuperándose en casa, María Antonieta de las Nieves vuelve a recordarnos que detrás del personaje hay una mujer fuerte, luchadora y agradecida. A pesar de los sustos, su esencia sigue siendo la misma: un corazón alegre que nunca deja de dibujar y de dar amor.