Me he dado cuenta de que la manera en la que he manejado cierta información no siempre ha sido la mejor. Aunque mi intención ha sido siempre informar con base en datos y fuentes confiables, también he caído en el error de emitir juicios innecesarios o comentarios que pueden ser ofensivos. Soy Elisa Beristain.
Hoy quiero reconocer que me equivoqué y que es momento de hacer un cambio. Puedo seguir compartiendo información relevante sin necesidad de atacar o utilizar calificativos que no aportan nada positivo.
La información que compartimos siempre ha tenido fundamentos sólidos, pero no hacía falta agregar comentarios que pudieran interpretarse como un ataque. Ahora comprendo que, aunque el periodismo de espectáculos implica exponer ciertos temas delicados, no debemos caer en la descalificación. Mi trabajo es informar, no dañar.
Reconocer mis errores no es fácil, pero es necesario. Durante mucho tiempo, cuando alguien me señalaba una equivocación, mi reacción era justificarme o restarle importancia. Hoy veo que ese no es el camino. No quiero ser soberbia ni aferrarme a una manera de actuar que, lejos de ayudarme a crecer, me estanca.
Aceptar que me equivoqué es el primer paso para mejorar y convertirme en una mejor persona y profesional.
Gracias a las críticas que he recibido, he podido reflexionar y darme cuenta de que el cambio es posible. No quiero seguir tropezando con la misma piedra ni repetir patrones que no me llevan a nada bueno. Aprender de los errores es un acto de humildad y valentía, y estoy dispuesta a hacerlo.
A partir de ahora, mi compromiso es seguir informando, pero con respeto, sin caer en el sensacionalismo y sin permitir que mis propias emociones influyan en mi trabajo. Gracias, les mando un saludo comadritas. Soy Elisa Beristain.
